Amianto, un peligro escondido en nuestros centros educativos
El amianto es el nombre de un grupo de minerales fibrosos
conocidos y utilizados desde la antigüedad para la construcción y que seguro
que lo identificamos más fácilmente por su nombre de uralita o fibrocemento.
Sin embargo, no es hasta 1978 cuando el Parlamento Europeo lo declarará
producto cancerígeno al demostrarse que las fibras de este material al
degradarse pueden originar varios tipos de cáncer de pulmón y pleura así como
un tipo de fibrosis pulmonar. Siguiendo estas recomendaciones España prohibía progresivamente
la fabricación y comercialización de los diferentes tipos de amianto hasta
culminar con la prohibición total a su fabricación, comercialización e
instalación en el año 2002.
En cuanto al amianto ya instalado en edificios una resolución
del Parlamento Europeo del año 2013 estima que los materiales de amianto tienen una vida
útil de entre 30 y 50 años antes de empezar a degradarse. Sin embargo, el
Centro Nacional de Nuevas Tecnologías reduce su vida útil a entre 30 y 35 años.
Además, si el amianto está aislado del aire que respiramos quizás no sea de
máxima urgencia su retirada, pero sí lo sería en caso de estar en contacto con
el ambiente como en el caso de las cubiertas y su desmontaje debería ser
realizado por una empresa especializada.
Tal es el caso de las cubiertas de los gimnasios del CEIP San
Isidro, uno de los centros escolares más
antiguos de nuestra localidad y construido en el año 1974, dándose además la
circunstancia de que las placas del aislamiento interno que separan el interior
de la cubierta han ido deteriorándose y cayendo al interior de los gimnasios
con lo cual, además del riesgo de impacto, han dejado que el amianto, no
sabemos si degradado o no, tenga contacto directo con el aire que respiran sus
usuarios. Por lo tanto, la vida útil de las cubiertas está más que superada y
se hace urgente una actuación sobre las mismas.
Parece que ahora, gracias a las reiteradas peticiones del
centro y de las familias agrupadas en su Asociación de Madres y padres de
Alumnos, así como a la visita de técnicos de prevención de riesgos laborales
del sindicato CCOO, el ayuntamiento de Aranjuez y la Comunidad de Madrid van a
empezar a moverse. Desde el ayuntamiento se ha anunciado la contratación de una
empresa para colocar las placas aislantes para separar el amianto del interior
de los gimnasios y técnicos de la Dirección General de Infraestructuras van a
visitar las instalaciones para ver su estado y realizar mediciones.
Pero esto no es suficiente. Pese a que en mayo de 2018 se aprobó por unanimidad
una propuesta del pleno municipal de Aranjuez presentada por el grupo ACIPA
para que se hiciera un inventario de instalaciones públicas priorizando las
instalaciones sensibles como colegios, instalaciones sanitarias o deportivas,
así como un plan de retirada paulatina exigiendo al resto de administraciones
titulares de los edificios que hagan lo propio parece que este no se ha llegado
a realizar. Por lo tanto, no conocemos el estado de nuestras instalaciones
aunque se calcula que hasta el 80% de los centros educativos pueden contener
este elemento, sobre todo los construidos entre los años 70 y 80 como es el
caso de varios centros de nuestro municipio.
También hay que recordar en abril del 2018, el PSOE pidió al
gobierno de la Comunidad de Madrid, a través de la Asamblea, que se elaborase
una lista de centros públicos que contuviesen materiales de amianto con
necesidad de realizar obras para su eliminación, y en el mes de julio el Pleno
de la Asamblea de Madrid aprobó una proposición no de ley, presentada por
Podemos, que instaba al Gobierno de la Comunidad a hacer antes de fin de año un
inventario de la presencia de amianto en centros educativos y de trabajo, así
como servicios centrales y universidades dependientes de la Comunidad de
Madrid. Tampoco se ha realizado.
Si bien los expertos y el marco normativo actual coinciden en
que el fin de la vida útil y el deterioro del amianto es el punto de partida
para su retirada, existe un vacío legal en cuanto a la fecha de esa retirada,
por eso para nosotros como Plataforma por la Escuela Pública de Aranjuez es
imprescindible que sean criterios técnicos los que se apliquen. Por esta razón
insistimos en la necesidad de disponer de mediciones de amianto y de informes
que avalen las decisiones tomadas. La preocupación por la alarma social no debe
ser en ningún caso argumento válido para llamar a la tranquilidad a la
comunidad educativa, sino, la información real, contrastada, pública y firmada por los
técnicos competentes que garanticen el estado de las instalaciones.
Por eso desde la
Plataforma por la Educación Pública de Aranjuez exigimos al Ayuntamiento de
Aranjuez que realice un inventario de los centros educativos de la localidad
para su traslado a la Consejería de Educación, que es la titular de los
centros, de modo que ésta establezca las partidas económicas necesarias así
como el calendario de eliminación. Del mismo modo exigimos a la Consejería de
Educación de la Comunidad de Madrid a que visite lo antes posible todos los
centros escolares de Aranjuez para la realización de su inventario y que se
comprometa a su retirada. El principio de precaución, en caso de duda, aconseja tomar medidas
protectoras a favor de los seres humanos.
Más información:
Vida
útil del amianto: datos definitivos.
Sin permiso. 24-5-2018
Diez
dudas sobre el amianto.
Revista Infórmate. Federación de
enseñanza de CCOO. Junio 2018.
La
mayoría de los centros educativos de la Comunidad de Madrid tienen amianto.
20 Minutos. 5-6-2018
https://www.20minutos.es/noticia/3359879/0/mayoria-centros-educativos-madrid-amianto/
La
Comunidad de Madrid retirará amianto de 16 centros educativos de la región.
El País. 9-6-2018
El
pleno de la Asamblea pide al gobierno un inventario del amianto en centros
educativos.
La Vanguardia. 12-7-2018
Padres
de un colegio de Leganés piden la retirada del amianto.
El Mundo. 19-10-2018
El
enemigo oculto.
RTVE. Informe semanal. 20-10-2018.
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